Insistir en la repetición de patrones de conducta que nos han funcionado en el pasado puede dar como resultado un aplazamiento en nuestro crecimiento e incluso coartar nuestra creatividad.
Con esto en mente podemos cuestionarnos quiénes somos o quiénes nos gustaría ser. ¿Somos acaso aquellos quienes limitamos los retos que se nos presentan o somos estos otros quienes retamos nuestros propios límites?
Posiblemente, la audacia que representa vencer nuestros propios límites no es una tarea sencilla; pero si hiciéramos un recuento de nuestras acciones, seguro es que podríamos identificar todas esas veces que hemos desafiado nuestro estatus quo. Repetidamente hemos sido capaces de enfrentar situaciones que nos han llevado a un crecimiento, algunas veces difícil y doloroso, pero al fin y al cabo crecimiento. Si pudiéramos entonces quitarle cierto grado de carga emocional al hecho de enfrentar y vencer nuestros propios límites para lograr nuevos retos, podríamos darnos cuenta de que sí somos aquellos quienes retamos a nuestros límites en vez de limitar nuestros retos. Podría ser que no lo hacemos de manera consciente y, de ser así, sería oportuno reconocerlo con el fin de volverlo un hábito.
Te has detenido a pensar ¿cuántas veces descargamos la nueva actualización del sistema operativo de nuestros dispositivos? Alguna vez oí que estas actualizaciones de sistemas operativos nunca están del todo listas y aún así las lanzan sabiendo que vendrá una nueva versión que corregirá lo que no hacía la anterior con muchas innovaciones más. De la misma manera podemos lanzar nuevas versiones de nosotros mismos, atrevernos a propagar nuestro potencial reconociendo que aprenderemos y que la única posibilidad que tenemos de fallar es la que ocurre al dejar de intentar.
Cuántos impedimentos hemos superado, cuántos ejemplos conocemos de tanta gente que le dijeron que no podía y lo hizo, cuántas veces se han vencido records mundiales, cuántas veces nos sorprendernos de lo que logramos cuando habíamos pensado que no seríamos capaces de hacerlo y aún así lo logramos.
Te invito a descargar ahora mismo la nueva versión de ti mismo con las innovaciones necesarias que contienen las llaves de nuevas puertas. Descúbrete, reinvéntate y sorpréndete con cada reto. Registra tus hallazgos y corrige en la siguiente descarga para seguir mejorando, creando, innovando y aprendiendo.
La mejor versión de ti mismo está en tus manos.